¡Qué idea tan original: Una novela de detectives!
Claro, ahora ya no nos parece tan original.
Pero sí que lo era en 1841, cuando Edgar Alan Poe publicó Los crímenes de la calle Morgue.
Hasta entonces no se había escrito ningún relato policíaco, lógicamente.
¿Por qué lógicamente? Ahora me explico.