Eva Julián 
Alexandra era joven, rica y guapa, y nadie en el pueblo se puede explicar su muerte.
Los padres de Alexandra piden a Erica, escritora y amiga de la infancia, que escriba un recordatorio para el funeral. Cuando comienza a investigar la vida de la víctima, descubre que hay muchas cosas de ella que no sabía…
El comisario Maigret, más que encontrar al asesino, quería entender sus razones, comprender al criminal.
Corpulento, vigoroso, incansable fumador de pipa, y bebedor de cerveza y calvados, es el protagonista de más de 70 novelas publicadas entre 1931 y 1972 por Georges Simenon, uno de los mayores escritores del siglo XX.
Mario es el jefe de enfermeros en una residencia geriátrica.
La película arranca con el ingreso como residente de Antonio Padín, un famoso narcotraficante que padece una enfermedad degenerativa.
Mario aguanta la compostura, pero se nota que la presencia de Padín le ha alterado. Pronto descubres que Mario tiene un secreto…
Cuando hablamos de las primeras novelas policiacas, pensamos en Sherlock Holmes o Hércules Poirot o Philip Marlowe o Auguste Dupin o Miss Marple o el inspector Maigret o…
¿Y los detectives españoles? ¿Cuáles fueron los primeros personajes de este género que aparecieron protagonizando novelas en castellano?
¿Cuándo apareció la novela criminal española?
Dos hermanas desaparecidas, de tres y cuatro años. Una de ellas, asesinada brutalmente; la otra, en paradero desconocido. Lo que significa que hay que encontrarla lo antes posible, viva y entera preferentemente.
La investigadora Victoria González recibe el anónimo encargo de buscar a la niña, junto a un sustancioso cheque.
Un temporal mantiene aisladas a nueve personas en una pequeña isla, frente a Corfú. Una de ellas, una discreta turista inglesa, aparece muerta en el pabellón de la playa.
Emulando a Agatha Christie y su novela “Diez negritos”, Pérez Reverte nos plantea en su última novela un enigma de habitación cerrada.
La agencia de detectives de Mateo Hernández tiene su sede en el barrio barcelonés de Sant Andreu. Allí, junto a Mateo, trabajan sus hijos Marc y Amalia, y un asistente, Ayala, encargado de los trabajos más sucios. Lola, la mujer de Mateo, colabora de una forma peculiar: sus intuiciones suelen ser desconcertantemente certeras.
En las novelas criminales hay dos Europas.
Al norte hace frío, los detectives beben como esponjas y se enfrentan a criminales despiadados y asesinos en serie que matan casi porque sí.
Al sur, los detectives comen bien y persiguen criminales que matan por dinero, por amor o por las dos cosas a la vez.
Mi loco – dice Mendoza – no está exactamente loco. Lo que tiene es descontrol en su cabeza….Tiene un gran sentido moral, es casi una monja. Quiere que siempre reinen la paz y el entendimiento. Les dice a los jóvenes que estudien y respeten a sus maestros, mientras él va por ahí, cometiendo delitos, uno tras otro.”
“El tercer aviso, que anunciaba que iba a continuar la ópera, sonó discretamente en los salones de descanso y los bares del teatro La Fenice (…) De pronto (…) apareció Amadeo Farsini, el gerente del teatro con aire cohibido.”
El director de orquesta había sido asesinado. Y el comisario Brunetti hizo su aparición en escena.