Título original: La huella del mal
Año: 2019
Autor: Manuel Ríos San Martín
En una visita escolar a Atapuerca, un estudiante descubre que una de las reproducciones que imitan los enterramientos prehistóricos es un cadáver real.
La policía intervendrá para resolver el misterio.
Un yacimiento mítico, un asesinato desconcertante, dos investigadores con un pasado secreto. Una novela de suspense cuya intriga te enganchará.
El argumento
Esta escena de la visita escolar es una de las primeras de la novela “La huella del mal”. Después de este macabro hallazgo, naturalmente en el pueblo se desata la inquietud.
Ese pueblo de la novela es “Niebla”, una localidad ficticia que Manuel Ríos San Martín ubica cerca del yacimiento burgalés.
El cadáver de la muchacha ha sido colocado siguiendo un ritual prehistórico, igual que el de otra chica muerta encontrada seis años antes en un yacimiento en Asturias.
Demasiados detalles coinciden con ese caso anterior, por lo que el juez decide reunir de nuevo a los dos policías que se hicieron cargo de la anterior investigación: Silvia Guzmán y Daniel Velarde.
Silvia Guzmán sigue en el cuerpo de policía. Es inspectora de la Unidad Central de Delincuencia Especializada y Violenta. En la investigación de este caso, le acompaña un inspector novato que colaborará en el caso.
Daniel Velarde es ahora un expolicía dedicado a la seguridad privada para clientes millonarios.
Nadie sabe que estos dos policías vivieron una relación sentimental mientras investigaban el asesinato de Asturias. La relación acabó de manera abrupta y ellos mismos creen que influyó en la no resolución del caso.
A pesar suyo, Silvia y Daniel se verán obligados a colaborar de nuevo. Sin embargo, ya te avanzo que hay final feliz: resolverán el caso y cerrarán la herida que quedó abierta hace seis años. ¿Alguien lo dudaba?
La Editorial Planeta tiene en su página web un booktrailer de esta novela.
Una novela escrita con buen pulso
La relación entre los dos policías, el hecho de ocultarla, que acabase de manera abrupta y no se hayan visto más, te puede hacer pensar en que es una situación banal, de esas que se repiten en mil novelas.
Pero no te engañes, ésta es una historia muy bien hilada, con un argumento muy sólido. Es un thriller narrado a caballo entre dos tiempos: el del asesinato de Asturias y el del asesinato de Burgos.
El relato te engancha con una trama de investigación policial llena de giros y más giros. A mí se me hizo un poco larga. Pero eso es un problema mío: me gustan más las novelas cortas.
Aunque es una novela de casi 600 páginas, está organizada en capítulos breves, lo que le da más agilidad, y también quiero remarcar que la tensión es constante. Yo no he dejado de sospechar de todos y cada uno de los personajes, según el momento de la novela.
Los personajes están delineados con una gran coherencia entre su carácter y su comportamiento. Son personajes redondos y muy bien definidos.
Además, la novela se sustenta en el gran trabajo de documentación que se adivina detrás. Yo he aprendido muchas cosas que no sabía sobre rituales prehistóricos.
La acción avanza con un ritmo que a veces es trepidante, con escenas muy potentes, como el acto sexual entre Daniel Velarde e Inés en el interior de la cueva (sexo, sangre, tensión casi primitiva), o como la persecución final.
En mi opinión, se nota el pulso del autor, curtido en mil batallas de escritura de guiones televisivos.
El autor
Manuel Ríos San Martín (Madrid, 1965) es director, productor, guionista de cine y televisión, escritor y profesor.
Ha sido productor ejecutivo, guionista y director de series como Colegio Mayor, Menudo es mi padre, Médico de familia, Más que amigos, Compañeros y Mis adorables vecinos.
Su primera novela, “Círculos”, fue publicada por Suma de Letras en 2017. Se trata de un thriller ambientado en el mundo de televisión.
“La huella del mal” fue la segunda, publicada en 2019 por Editorial Planeta.
Su última novela, publicada en 2021, es ”Donde haya tinieblas”.
El título
Antes de empezar la cuarta parte de la novela (que, por cierto, se titula “Parte IV: El mal), hay una cita realmente inquietante que nos explica el porqué del título de la novela:
“Desde los orígenes nos vimos obligados a matar para sobrevivir. La naturaleza nos hizo así para competir con hienas, leones, osos y con otras especies humanas, hasta exterminarlas. Eran ellos o nosotros. Devoramos hasta el tuétano de sus guerreros, de sus mujeres, de sus hijos. Los violentos sobrevivieron y transmitieron sus genes. Somos descendientes de la violencia.
Es el mal que llevamos dentro.”
¿Qué tenemos en común con nuestros antecesores de la prehistoria? Ésta es la pregunta que nos provoca esta novela de intriga y suspense que recurre a un escenario pocas veces visto y muy interesante.
¿Has leído tú alguna novela de este escritor?
Te espero en los comentarios.
Más información sobre el autor en su web oficial.
También puedes ver una entrevista al autor en la web de El Independiente.