Stieg Larsson

Larsson murió en 2004 dejando tres novelas inéditas que componen la trilogía “Millennium” y que se convirtieron en un éxito de ventas póstumo en toda Europa.

Los personajes del periodista Mikael Blomkvist y, sobre todo, de la hacker informática Lisbeth Salander te atrapan en una intrigante novela de suspense donde la violencia sacude cada página.

La prosa de Larsson es brillante y funcional y, aunque no todos los personajes son exactamente multifacéticos, el ritmo y la trama de las tres novelas son magistrales.
No es de extrañar que Europa se volviera loca por esta trilogía.

El argumento de la trilogía

La historia gira en torno a un complicado fraude financiero internacional y al pasado mal enterrado de una rica familia industrial sueca a lo largo del siglo XX.

La trilogía está compuesta por los títulos siguientes:

• Los hombres que no amaban a las mujeres (Män som hatar kvinnor, 2005)
• La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina (Flickan som lekte med elden, 2006)
• La reina en el palacio de las corrientes de aire (Luftslottet som sprängdes, 2007)

En “Los hombres que no amaban a las mujeres”, el anciano y rico empresario Henrik Vanger propone al periodista Mikael Blomkvist escribir una biografía de la familia Vanger. Sin embargo, es una excusa, ya que lo que pretende es que Blomkvist investigue la desaparición de su sobrina Harriet, ocurrida 36 años antes.
Durante sus pesquisas, conocerá a la sorprendente Lisbeth Salander, una eficiente hacker informática con la que acabará formando equipo.

En “La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina”, Mikael Blomkvist es contactado por Dag Svensson, un periodista frrelance, para que la revista Millennium publique un artículo sobre el tráfico sexual de mujeres de Europa del Este en Suecia, el cual involucra a altos cargos del Gobierno.
Svensson y su pareja son asesinados y la policía acusa del crimen a Lisbeth Salander.
Blomkvist tendrá que demostrar la inocencia de Salander, mientras trata de completar el trabajo de Svensson y descubrir el vínculo entre ambos.

En “La reina en el palacio de las corrientes de aire”, se descubre la existencia de un grupo secreto dentro del Servicio de Seguridad sueco, el cual ha cometido varias violaciones constitucionales en contra de Lisbeth Salander.
Mikael Blomkvist, en colaboración con la policía, intenta destapar las identidades de sus miembros y que los cargos de asesinato contra Salander sean retirados.

Carátula de la película Los hombres que no amaban a las mujeres

Los personajes principales

Mikael Blomkvist es un periodista y copropietario de la revista mensual Millennium (de ahí el título de la saga).
A lo largo de las novelas, lo vemos como un periodista íntegro que intenta destapar delitos impunes, como los tejemanejes y la corrupción del gran capital y el nazismo que aún perdura en ciertos sectores de la sociedad sueca.

Lisbeth Salander es una hacker informática veinteañera, antisocial e inteligente. Cuando la vamos conociendo, vemos que ha sufrido todo tipo de abusos imaginables en su joven vida, desde agresión sexual hasta una estancia en una clínica psiquiátrica donde le aplicaron tratamientos poco ortodoxos.

Ha pasado por centros de menores y se supone que no está rehabilitada, por lo que tiene un tutor legal, Nils Bjurman, que es un abogado corrupto que también abusa de ella… hasta que Lisbeth le para los pies de manera muy poco amable, pero contundente.

Henrik Vanger es un anciano jubilado, exdirector de la Corporación Vanger. Es el tío de Harriet Vanger, que desapareció hace 36 años, y es el que encarga a Blomkvist que la busque.

El autor

Larsson nació en la ciudad sueca de Skelleftehamn y creció en el campo con sus abuelos.

A los 14 años, estando de camping, fue testigo de cómo sus amigos violaban a una chica. Días después se cruzó con ella por la calle y se acercó a excusarse por no haberlo evitado, pero ella lo rechazó. Ese episodio le hizo sentir una gran culpabilidad y le marcó para siempre. Desde entonces se convirtió en un feminista convencido.

Fue uno de los impulsores de las protestas contra la Guerra de Vietnam. Durante una de las manifestaciones conoció a Eva Gabrielsson, que se convertiría en su pareja.

Portada de la novela Los hombres que no amaban a las mujeres, de Stieg Larsson

En 1995, Stieg Larsson fue cofundador de Expo Magazine, una revista antirracista sueca que se publica trimestralmente. Está respaldada por la Fundación Expo, organización sin fines de lucro que se centra en la investigación “de las tendencias antidemocráticas, de extrema derecha y racistas en la sociedad». Desde 1999, Larsson fue el director de la revista.

Escribió varios libros de investigación periodística acerca de los grupos nazis de su país y de las conexiones entre la extrema derecha y el poder político y financiero.
Larsson sentía también un gran interés por la ciencia ficción y presidía la sociedad escandinava de este género.

Muy trabajador, fumador compulsivo de tres paquetes de tabaco al día, bebedor asiduo de café, aquejado de insomnio y amante de la comida basura, su corazón acabó afectado por este modo de vida y falleció de un infarto en 2004.

La herencia de Stieg Larsson

Larsson tenía planeado escribir una saga de 10 novelas, pero falleció justamente unos días después de haber entregado a su editor el tercer volumen de la saga, y poco antes de que se publicara el primero.

Así, pues, no llegó a ver publicada la obra que le llevaría a la fama, y su temprana muerte truncó su plan de continuar la serie.

Su compañera sentimental durante 32 años, la arquitecta sueca Eva Gabrielsson, asegura que cuando Larsson falleció ya había comenzado a escribir la cuarta novela de la saga.

Tras su muerte, se hizo pública la polémica entre sus herederos.

El legado de Stieg Larsson provocó un enfrentamiento entre su compañera, Eva Gabrielsson, y el padre y el hermano del escritor. Son éstos quienes han recibido la millonaria herencia, dado que Eva y él eran pareja estable pero no estaban casados.

Amenazado por la ultraderecha, no quiso casarse con Eva, para que su nombre no constara en ningún registro oficial (un compañero periodista suyo fue asesinado con un coche-bomba).

Sin embargo, Gabrielsson cree que es ella quien debería tener el control de los derechos de sus obras, al ser la persona que mejor le conocía. De hecho, Larsson abandonó el hogar familiar a los 18 años y desde entonces vivió con Gabrielsson, sin mantener apenas contacto con su padre y hermano.

Los Larsson ofrecieron a Eva un acuerdo por el que le daban 20 millones de coronas suecas y la tercera parte de los derechos de autor, aunque esta oferta fue rechazada por la viuda.

Carátula de la película La chica del dragón tatuado

En 2013 la editorial sueca Norstedts contrató al escritor David Lagercrantz para continuar la saga. Se publicaron tres novelas, que no están basadas en los borradores inconclusos de Stieg Larsson.

En noviembre de 2021, la editorial Polaris adquirió los derechos de la saga de los herederos de Larsson y anunció una nueva trilogía de libros escritos por la autora sueca Karin Smirnoff. Se ha publicado ya una novela, que tampoco se basa en los borradores de Larsson.

La crítica de la sociedad sueca

Suecia tiene la imagen de ser un país agradable y cívico, donde todo el mundo va en bicicleta y todo huele a café.

Sin embargo, si has estado leyendo ficción policíaca sueca reciente, por ejemplo del escritor Henning Mankell o la saga del inspector Martin Beck, ya habrás visto que, debajo de esa imagen tan idílica, Suecia puede ser también trepidantemente negra.

En la trilogía Millennium de Stieg Larsson, no todo son juegos literarios. En consonancia con la novela negra sueca reciente, Larsson aprovecha para dejar caer comentarios críticos sobre la sociedad sueca. Sus objetivos favoritos son la violencia contra las mujeres, la corrupción del gran capital, la cobardía de los periodistas de investigación y el nazismo que perdura en sectores de la sociedad y de la justicia sueca.

Lisbeth Salander va al cine

En 2009 se estrenó una adaptación cinematográfica de la primera novela de la saga, dirigida por Niels Arden Oplev, con los actores suecos Michael Nyqvist y Noomi Rapace en los papeles protagonistas.
“Män som hatar kvinnor” (literalmente “Hombres que odian a las mujeres”), de más de dos horas de duración, se estrenó en Suecia y Dinamarca en febrero de 2009.

Esa primera película alcanzó un notable éxito de taquilla y favoreció el estreno, también en 2009, de las adaptaciones de las otras dos novelas, dirigidas por Daniel Alfredson, con los mismos actores suecos.

Más tarde, las tres películas fueron adaptadas a una miniserie de seis capítulos, la cual incluye escenas eliminadas de la versión cinematográfica. Esta miniserie se estrenó en 2010.

En 2011 se estrenó en Estados Unidos y Canadà “The Girl with the Dragon Tattoo”, basada en la primera novela, dirigida por David Fincher y protagonizada por Daniel Craig, Rooney Mara y Christopher Plummer.
Esta película ganó un Óscar al Mejor Montaje, además de ser nominada en la categorías de Mejor Actriz (Rooney Mara), Mejor Fotografía, Mejor Mezcla de Sonido y Mejor Edición de Sonido.
En España se estrenó con el título “Los hombres que no amaban a las mujeres”.

Más información sobre los libros en la web oficial de la saga Millennium de la editorial sueca Norstedts Förlag.
Más información y tráiler de la película sueca de 2009 en filmaffinity, y de la película estadounidense de 2011 en el canal de youtube de Sony Pictures.

¿Has leído las novelas de la saga Millennium?

2 comentarios en «Stieg Larsson»

  1. Me leí la saga completa, en un postoperatorio. Tengo que decir que me gustó mucho y que con este autor descubrí la novela negra nórdica, que me encanta.

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    • Yo la leí completa, aunque confieso que el primero me gustó mucho y los otros dos sólo regular.
      Yo también estoy enganchada con la novela negra nórdica, me encanta.
      Gracias por tu comentario

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